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Mostrando entradas de octubre, 2011

Notas de nuestro Encuentro

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Reflexiones sobre el XXVI Encuentro Nacional de Mujeres “¡¡Se va a acabaaar, se va a acabaaar, el Movimiento Populaaar!!”.   Me equivoqué, vamos de nuevo.  “¡¡Se cuidan, se cuidan, se cuidan los machistas, América Latina va a ser toda feminista!!”. Seguido, “¡Manolo, Manolo, hacete el pete solo!”.   Que no se ofendan los manolos, pero en ese contexto la frase representó un grito de desapego y liberación tan atrevido como pegadizo. Por eso en masa y cantando ninguna boca quedó cerrada.   Esto es apenas un par de las docenas de cánticos que sonaron la tarde del domingo pasado en la marcha, actividad central del 26º Encuentro Nacional de Mujeres que se realizó en Bariloche el fin de semana pasado. Dicen que una mujer que va al Encuentro nunca vuelve igual. El tiempo no me alcanzó para cambiar, pero entendí el por qué de la afirmación. En él, miles de años de sumisión cargados en la memoria inconsciente se convierten en explosiones de catarsis e independencia. La energía colectiva

Split Fest: Rock por dos al precio de uno

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Entrevista a Manada y Marfil “Siempre soy puntual, no llego tarde a ningún lugar (¿?). El distraje previo a la reunión fue una completa excepción”. Pero en la esquina me esperaban tres músicos, una entrevista medio en serio y una reunión definitivamente entretenida. Esa secuencia terminó en esta nota de los combos, todo al mismo precio y por el mismo lugar. Estaban Matías Semproni de Marfil y Fran Ricci junto a David Maestre de Manada. El motivo de la entrevista, la realización del Split Festival el próximo viernes 7 en El Arrimadero Teatro a partir de la medianoche. Las bandas se enmarcan en el estilo del rock alternativo y acompañan influencias, pero cada una mantiene su impronta personal. Hace un año que comparten recitales y, por amistad, camaradería y esas ocurrencias copadas que se tienen a veces, decidieron graban un demo en conjunto. Así nació el proyecto del “Split Manada Marfil”, idea tomada de los ’80, cuando grupos de diferentes géneros propusieron un nuevo formato para l

De rock y roles

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Entrevista a Dulce Ironía Mates, galletitas, ruta y sol. Así emprendimos camino hasta Fernández Oro, donde nos esperaban una entrevista y tres recitales. Entre banda y banda se hizo de noche y bajó el frío. En la mitad perdí un guante y, entre flashes y centellas, descubrimos que casi todas las mujeres del lugar habían sido devoradas en un ataque de hombres zombies. Alrededor no había más que la ruta vacía y una única estación. Estábamos en las llamadas “globas del ferrocarril” donde casi todos los fines de semana suenan recitales de rock. Esa noche el escenario reunió a The Papers de Centenario, Cromosoma X de Neuquén y Dulce Ironía de Fernández Oro. Sonaba la primera de estas bandas cuando nos escapamos con Rodrigo Troncoso y Nadia Escobar de Dulce Ironía hasta un recoveco silencioso del patio del salón. Ella es bajista y cantante, él violero y corista. Completan la formación Bruno en guitarra y coros, y Parche en batería. Empezamos a charlar y automáticamente los conceptos de

Cultura Profética: Reggae con contenido y conciencia

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          La banda puertorriqueña de reggae, Cultura Profética, se presentó por primera vez en la región el pasado viernes 16 en el boliche Meet. Como telonero estuvo Kimany Marley (hijo de Bob), presentando su último trabajo discográfico “Radio”.             Fue uno de los recitales más esperados del año y las plegarias reiteradas para que algún productor los acerque hasta el “sur” fueron escuchadas. La noche del 16 de septiembre llegó con frío y viento al local del lado cipoleño del puente. Tras una hora de espera entre fumarolas que se disparaban al aire y panchos del carrito del frente para bajar el hambre, la cola seguía alargándose y entre todos definíamos la interrogante colectiva: “¿¡Por qué todavía no se abren las puertas!?”. Resulta ser que Cultura llegó apenas unas horas antes del show. Venían de una presentación en el Luna Park, con un recital de tres horas cuarenta bajo el brazo y catorce de ruta encima. Estaban evidentemente cansados y el asunto no termina